Tras años de implementación del proyecto bilingüe en nuestro centro, las maestras de educación infantil detectamos un gran desequilibrio entre las diferentes competencias lingüísticas a desarrollar en el área de inglés.
Aunque nuestros alumnos adquirían un muy buen nivel en las habilidades de comprensión y expresión oral, su nivel era inferior en las habilidades de comprensión y expresión escrita. Trabajábamos a un nivel básico el reconocimiento de los 42 fonemas de la lengua inglesa y, aun así, las dificultades eran muchas y variadas, especialmente cuando comenzábamos con el uso de dígrafos.
Decidimos entonces adaptar un sistema de enseñanza fonética a las necesidades de nuestro centro. Para ello creamos una serie de materiales didácticos en muy diferentes soportes que diera cabida a todas las inteligencias y, por tanto, sirviera para todos nuestros alumnos independientemente de sus capacidades y/o habilidades.
Partiendo del método Jolly Phonics, hemos redefinido el mismo, desarrollando nuevos materiales, adaptándolo a nuestros alumnos no nativos, poniéndolo en consonancia con los diferentes tipos de inteligencia y dotándolo de un carácter lúdico y multidisciplinar para su mejor asimilación.
Volver